Revivo aquella noche en que olvidamos lo demás. El cielo se volvió rojo, al sol vimos bostezar.
¿Discusiones? Claro, pero eso nos hace más fuertes, normalmente son sobre nosotros. Y eso quiere decir, que hay un ''tú+yo''.
Me encanta tu risa, me encanta que te piques diciendo que paso de ti cuando en realidad somos los dos. También me encanta observarte de lejos como te colocas bien el pelo haciendo ese gesto tan gracioso cuando te molesta el viento. Tu manera de reírte mordiéndote la lengua me pone nerviosa, pero a la vez me vuelve loca. Cuando caminas hacia mi, con la cabeza agachada y una mini-sonrisa que se ampliará en cuestión de segundos, eso también me gusta. Lo gracioso que eres cuando dices alguna tontería y te tapas la boca con las dos manos cerrando mucho los ojos y seguidamente me das un abrazo, eso también me encanta. Tu forma de escribir, ponerte la mano en la cabeza apoyándote en la mesa mientras te tocas el pelo y de vez en cuando echas un vistazo a tu alrededor. Esos besos infinitos que me das que nunca me dejas que supere. Cuando me dices ''te odio'' mientras me abrazas fuertemente. Esa manía que tienes de mirarme fijamente a los ojos aun sabiendo que es lo que más nerviosa me pone. Me encanta todo eso y más, y no quiero que dejes de hacerlo por nada del mundo. Pero sobre todo, no dejes de quererme.
+ Es que me da la impresión de que piensas que soy una pesada, y no me gusta ser pesada, ¿sabes?
- ¿Qué dices, tío? nunca pensare eso.
Ahora desearía decirte cosas mal sonantes y mandarte a la mierda para siempre, es una pena que el corazón no sea capaz de decirlo, porque no lo siente.
Si dos que estuvieron enamorados vuelven a ser amigos una de dos: 1- O no estuvieron enamorados. o 2- Aun lo están.